Vinagreta de perejil y ajo - Vinaigrette di prezzemolo e aglio

Traduzione in italiano in basso

Vinagreta de perejil y ajo

Vinagreta de perejil y ajo

La vinagreta es probablemente la salsa francesa más famosa. El nombre deriva del francés “vinaigre” que significa vinagre.

En general se usa mezclar una parte de vinagre o limón por tres partes de aceite y sazonarlo con sal y pimienta y los ingredientes específicos. Se dice que la receta base, o original, consiste en mezclar partes iguales de aceite y vinagre, jugo de limón, sal y pimienta al gusto.

Las vinagretas pueden ser la esencia de una ensalada o del plato que con ella se aderece. Es muy apropiada para aderezar nuestras recetas de verano como una ensalada de pollo, una ensalada de atún o verduras al vapor.

El sabor de una vinagreta depende principalmente del tipo de vinagre y de aceite que se usa. Se recomienda usar aceites delicados como el aceite de manzana. Sin embargo, en función del tipo de vinagre y la fuerza que éste tenga, se ajustará después la proporción de aceite de oliva a utilizar por ejemplo un vinagre balsámico, cuyo sabor y textura son más suaves y profundos, requiere una menor cantidad de aceite. Si quieren una vinagreta con un toque oriental pueden sustituir el aceite da manzana por aceite de arroz.

Por el aceite: lo mejor es preferir de aceites de alto contenido de ácidos grasos buenos, como el aceite de oliva, rico en grasas monoinstaruradas. Entre otros de recomiendan también el aceite de girasol, el aceite de linaza o el aceite de soya. Lo mejor es escoger siempre aceites orgánicos exprimidos en frio, para aprovechar todas sus propiedades nutricionales.

Las especias y las hierbas finas son indispensables para una buena vinagreta. La composición de la mezcla de finas hierbas puede variar según el plato que se desee cocinar, siempre que la mezcla la pueda hacer uno mismo y preferiblemente con hierbas frescas y no secas. Cuando escogen las hierbas o las especias tomen en cuenta no solo el sabor sino también las propiedades que tienen. Las hierbas finas son amigas y aliadas de la salud. Conocerlas es el primer paso para poderlas usar según las necesidades.

Hoy propongo una vinagreta de perejil y ajo. Se trata de una vinagreta muy indicada para acompañar pescado al vapor o ensaladas de pescado. Yo la usé para acompañar una ensalada de quínoa y pescado.

En la preparación de esta vinagreta usé abundante perejil, que se destaca sobre todo por sus propiedades antioxidantes y por ser un buen diurético.

También usé un poco de albahaca, una planta que tiene efecto antiespasmódico, y se utiliza mucho como ayuda digestiva y contra espasmos gastro intestinales. También es diurética y tiene efectos benéficos contra parásitos intestinales y en dispepsias nerviosas.

En fin, en la vinagreta añadí un toque de ajo…cuyas propiedades “milagrosas”  no me cansaré de comentar. Siempre aprovecho cuando publico alguna receta que lo contenga para contar algo sobre esta planta de los miles beneficios y para recomendar su uso abundante en la cocina. El ajo es quizás el remedio natural con mayores propiedades medicinales demostradas experimentalmente. Entre tantas propiedades se destacan: efecto hipotensor a dosis altas, fluidificante de la sangre - muy utilizado por personas que han padecido trombosis, embolias o accidentes vasculares-, hipolipemiante -disminuye el colesterol LDL, antibiótico y antiséptico general, estimulante de las defensas, vermífugo, callicida. 

Así que les recomiendo que cuando preparan una vinagreta piensen, no solo en los sabores que más les antojan en el momento, sino también en las propiedades de los ingredientes que van a utilizar. Así no solo estarán comiendo una vinagreta original y muy sabrosa, sino que al mismo tiempo estarán cuidando su cuerpo y tratando de obtener un beneficio específico o mejor aún estarán tratando de sanar una molestia específica, dependiendo de lo que más necesita su cuerpo en un momento preciso.

Recuerden que la salsa vinagreta (si no se le añade huevo, ni yogur) puede durarnos varios días y se conservan bien tapadas en la nevera.

Y ahora…dicho esto… vamos a la receta!

Ingredientes para 200 ml

150 ml de aceite de oliva virgen extra

50 ml de vinagre de vino blanco

Perejil, una taza

Albahaca, media taza

Sal

2 dientes de ajo

Preparación

Poner la sal la pimienta y el vinagre en un vaso y removerlos hasta que la sal se deshaga.

Lavar bien el perejil y la albahaca. Preparar en ajo. Triturar estos ingredientes, posiblemente  con la ayuda de una licuadora para obtener un compuesto muy fino.

A continuación se añade el aceite y se remueve enérgicamente hasta que quede ligado

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Vinaigrette de prezzemolo e aglio

La vinaigrette é forse la salsa francese piú famosa. Infatti il termine vinaigrette deriva dal termine francese "vinaigre", cioè aceto. La base della ricetta é l’unione dell’olio con l’aceto di mele: una fusione delicata e raffinata che si presta benissimo per accompagnare un’infinitá di piatti.  La preparazione é semplicissima e soprattutto si presta a molteplici varianti. La combinazione di ingredienti dipende in primo luogo dalla creativitá e l’originalitá dell’autotrice o dell’autore.

Le spezie e le erbe aromatiche si sposano benissimo con questa salsa. Insomma erbe e spezie, tanto nostrane come esotiche, sono amiche di una vinaigrette originale. Quindi. Mano libera alla fantasia!

Le esatte quantità per la preparazione di una vinaigrette variano a seconda dei gusti. In generale si consiglia di prepararla con 3 parti di olio e 1 parte di aceto. É comune anche la preparzione con una uguale dose di olio e aceto, succo di limone, sale, pepe.

Quando preparate una viniagrette cercate di pensare non solo alla combinazione dei sapori e al piatto da accompagnare ma tente sempre presente anche le innumerevoli proprietá che ci regalano le erbe aromatiche. Non dimenticate mai in cucina che le piante sono preziose alleate con notevoli proprietá curative e terepeutiche.

In questa vianigrette, ho scelto di abbondare con il prezzemolo, ottimo alleato contro l'anemia, la stanchezza e la spossatezza cronica. Inoltre, questo alimento é raccomandato in caso di reumatismi, contro la gotta, per regolarizzare il ciclo mestruale, per combattere la ritenzione idrica, per regolarizzare la digestione e il transito intestinale, per prevenire flatulenze e fermentazioni, per migliorare la circolazione e tutto l'apparato cardio-circolatorio. Per finire, si consiglia anche contro le parassitosi inttestinali e le infezioni urinarie.

Nella preparazione ho usato anche un poco di basilico, una pianta apprezzata per le indubbie proprietà digestive, antispasmodiche, carminative, antisettiche. Si raccomanda di abbondare con il consumo di basilico soprattutto soprattutto per chi soffre di cattiva digestione, coliche e emicranie, disturbi gastrointestinali e delle vie urinarie.

Infine, ho aggiunto alla mia vinigrette l’immancabile aglio: una piante le cui proprietá non mi stancheró mai di elencare e di raccomandare. In primo luogo bisogna dire che all’aglio è attribuita la proprietà di rafforzare in modo naturale il sistema immunitario. Si tratta infatti di un potente antimicrobico contro batteri, funghi e virus. Vari studi dimostrano che l’aglio si puó considerare come un alimento anticancerigeno poiché inibisce le fasi della cancerogenesi. Inoltre l’aglio ha la capacità di ridurre il colesterolo e abbassare la pressione arteriosa poiché svolgere un'azione depurativa e contribuisce in modo determinante alla pulizia delle arterie e all'allontanamento delle patologie ad esse legate.

Detto questo… passiamo alla ricetta!

Ingredienti per 200 ml

150 ml olio d’oliva extravergine

50 ml aceto di mele

Prezzemolo, una tazza

Basilico, mezza tazza

Sale

2 spicchi d’aglio

Preparazione

La preparazione è molto semplice e veloce.In primo luogo sciogliere il sale nell’aceto mescolado velocemente.

Lavare il prezzemolo e il basilico. Sbucciare l’aglio. Tritare finamente tutti gli ingredienti, prferibilmente con l’aiuto di un mixer o un frullatore per ottenere un composto ben omogeneo.

Infine aggiungere l'olio a filo e sbattere gli ingredienti con l’aiuto di un frustino fino a che non saranno emulsionati.